Encuesta 96

Interesante encuesta la planteada esta pasada semana, con una participación que la ha posicionado entre las cifras récord a lo largo de este bienio con la iniciativa en marcha. En nuestra pregunta, planteada estando a punto de celebrar un nuevo aniversario de nuestra Constitución el próximo 6 de diciembre, hacíamos mención a las preferencias de nuestros votantes respecto de los 7 presidentes que, desde la vigencia de nuestra actual Carta Magna, habían liderado el Gobierno de España.

La cuestión se planteaba desde el punto de vista de ser la referencia en negativo, identificando al candidato peor entre los políticos que habían accedido a esa función de Presidencia. Las cifras cantan por si solas y empezaremos omitiendo aquellas candidaturas que se han quedado en el irrisorio 0 o 1%, descartando por tanto de forma directa a 4 de los 7.

A la hora de elegir al peor nuestro público ha liberado de esa presión a dos candidatos con unos votos que no han podido superar el 0%, nos referimos al Leopoldo Calvo Sotelo, el menos mediático y con una temporalidad en el cargo muy corta, y a Felipe González. Este último con sus afines y sus contrarios pero que, con el paso del tiempo y viendo lo que el socialismo español ha posicionado como candidato de su partido a la máxima representación política de España, lo han mejorado al hacerse comparativas. Tanto es así que, con los miles de votos recibidos, no se ha movido del nulo porcentaje a la hora de señalar al peor de los presidentes del Gobierno.

Consolidando el nimio porcentaje del 1% se han situado otros dos candidatos. En este caso tenemos al primer presidente y al penúltimo, Adolfo Suárez y Mariano Rajoy, respectivamente. Ambos, junto a los dos mencionados en el párrafo anterior, quedan liberados del podio que nombra a los tres peores.

Entrando en los que han superado ese umbral bajo del 1% llegamos al tercer puesto. Un bronce que se lo adjudicamos a José María Aznar. Su porcentaje del 4% sigue siendo bajo, respecto de los que han subido a lo alto del podio. Su gestión tiene muchas luces y sombras, quedando en la retentiva de los votantes de nuestra encuesta, altamente sensibilizados con la dinámica seguida por este presidente con el nacionalismo catalán, su connivencia con ellos para poder gobernar. El Majestic, el cese de Vidal-Quadras, su catalán en la intimidad, junto a las numerosas cesiones en las transferencias al descentralizar el poder, con la educación como protagonista, le acompañarán siempre al hacer una valoración de su trayectoria.

Ya en una posición de privilegio, por posición y número de votos, llegamos al segundo gran referente del socialismo español en esta encuesta de búsqueda del malo entre los malos. El honor de alcanzar ese privilegiado rol segundón queda acreditado en favor de nuestro amigo ZP. Zapatero se alza con un determinante 15%, que le da suficiente solvencia para acreditarse ese puesto destacable. Podría escribirse un libro al pensar en este personaje. Pero, intentando que no se note la vergüenza que sentimos al hablar de él, seremos prudentes al resumir la gestión del que fuese el amigo de las civilizaciones. Nos quedaremos con la idea, no baladí, de que es el principal culpable de lo que estamos teniendo que vivir los catalanes libres del nacionalismo. Fue el que sentenció con su frase en el Parlament, en pleno redactado del que era el “nuevo Estatuto”, dando carta libre a su redacción sin condicionantes y con permisividad absoluta. Su aparente puesta del semáforo en verde, obviando al poder judicial del Estado, anticipando que sería aceptado en Madrid (Las Cortes) lo que se definiese en Cataluña, nos condenó a un periodo que, a la postre, ha derivado en lo que hoy nos toca soportar. Este caballero, de limitada visión política, no calibró bien lo que sus palabras podrían suponer en el medio y largo plazo, dejando en manos del lobo la definición de las normas para entrar en el gallinero. Quedó, para la historia, como el peor presidente que podría tener España y con indigeribles contactos y amistades con regímenes poco democráticos. Una persona sin nivel para representar a una potencia mundial como somos. Pero, aun así, el tiempo ha demostrado que hasta Zapatero puede ser superado.

Llegó el momento de Mister Universo. El atractivo sinigual del bello entre los bellos no deja margen a la duda. La tentación para votar a Pedro Sánchez, como el peor presidente del actual periodo constitucional, ha supuesto acreditarle una aplastante mayoría del casi 80%. Al hablar del malo con malicia la duda no existe. 4 de cada 5 votos no han dudado en apostar por este singular personaje. En este caso podíamos escribir varios tomos o, como quizás prefiera, que la escribiese otro y luego ya diremos que la hemos escrito nosotros. A fecha de hoy todavía no somos capaces de entender como un país como el nuestro ha podido caer tan bajo y creerse a tan singular y prometedor mago de las mentiras. Hasta hace pocos años nos creíamos que Zapatero era irremplazable, pero, tras un tiempo, para la mayoría ha quedado claro que todavía era posible descender otro escalón.

Se trata de una persona necesitada de privilegios y poder, con un egocentrismo enfermizo capaz de condenar el futuro de España por seguir en el sillón presidencial, al que no le tiembla el pulso al vender nuestro país a cambio de apoyos, sin hacer feo alguno al respaldo de los que declaran como objetivo irrenunciable la ruptura de España o, peor todavía, los que han segado la vida de casi un millar de compatriotas, muchos con el mismo carnet político que suponemos aun lleva en la cartera.

Sus reiterados desplantes y postureo, dando alas a los que son el cáncer político de España, no pasan desapercibidos. Su afán por alimentar al comunismo, sin poner trabas para alinearse sin escrúpulos en favor de los separatistas, le pasan factura. Los millares de personas que han optado por señalar al actual como el peor presidente de España, con un 79%, dan una clara respuesta a nuestra encuesta. El socialismo, omitiendo al bien valorado Felipe González cuyo sentimiento español está años luz, posiciona a la dupla Sánchez-Zapatero con un global del 94% de los votos. Queda clarificado lo peor de lo peor, subrayando al actual presidente en la cima privilegiada del más malo entre los malos. Tanto es así que ha sido capaz de superar con creces al que pensábamos y hubiésemos deseado que fuese insuperable.

¿Cuál crees que ha sido el peor presidente de España desde la entrada en vigor de la Constitución de 1978?

  • - Adolfo Suárez. (1%)
  • - Leopoldo Calvo Sotelo. (0%)
  • - Felipe González. (0%)
  • - José Maria Aznar. (4%)
  • - José Luis Rodríguez Zapatero. (15%)
  • - Mariano Rajoy. (1%)
  • - Pedro Sánchez. (79%)
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2021-11-22T10:28:05+01:00

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