¿Qué opinas del veto a los niños valencianos por escribir a los Reyes Magos en español?

Es habitual ser testigos del comportamiento abusivo que de forma corriente tiene lugar en Cataluña en contra de los que hablamos español. Un caso claro, por ejemplo, es la negación de la posibilidad de hablar en la lengua mayoritaria de los catalanes en un programa de la televisión pública pagada por todos como es la sectaria TV3.

Dicha situación se ha repetido hace poco con una niña a la que, participando en ese canal que sirve de coladero de millones propagandístico del separatismo, se le negó el uso de la lengua de todos los españoles. Uno de esos momentos repulsivos y que sirven de muestra evidente del odio que sienten los fanáticos del lacito amarillo hacia la patria y cultura de la que también son parte.

Una vez más, con ese esperpento televisivo como herramienta, hemos visto la incapacidad de digerir su totalitarismo, mostrando públicamente su sentimiento de inferioridad y victimismo. Un complejo de víctimas del que saben sacar provecho y que les corroe el alma, haciendo que aflore su supremacismo hiriente. Especialmente si lo que está por medio es algo tan importante para su conciencia adoctrinadora como es la lengua, arma fundamental para diferenciar lo bueno y lo malo para estos fanáticos energúmenos.

En Valencia las cosas van también en la misma línea. Sabemos que, en estas pasadas Navidades, los Reyes Magos que distribuyen regalos en esa parte de España filtraron las cartas que recibían vetando las que no estaban redactadas en lengua valenciana. Una ocurrencia muy propia de los catalanes y su obsesión que ya se replica en la comunidad vecina del sur.

Ese ha sido el argumento de nuestra encuesta de la semana pasada, obteniendo un 0% de apoyo la respuesta que se posicionaba en favor de la redacción en valenciano de las cartas, como aplicaron los fanáticos monarcas que trabajaron en Valencia el pasado día 6 de madrugada.

Las respuestas que se han llevado la mayoría de votos se reparten entre los que opinan que todo esto que nos pasa, tanto en Valencia como en Cataluña, se debe a una falta de corrección y postura solvente del Gobierno de la nación, excesivamente permisivo y connivente con toda esta situación de prepotencia e imposición de las minorías sobre la mayoría. Esa opción suma un apoyo del 60% de los votos de la encuesta, quedando el 40% restante para los que se posicionan en un enfoque más acorde al momento, votando a favor de la ilusión de los niños. El disfrute y bienestar de éstos no debe verse afectado por condicionantes ni matices como puede ser la lengua del niño o la familia.