¿Vas a celebrar la Semana Santa?

Acabamos de pasar unas vacaciones de Semana Santa que mucho se han parecido a las de antes de la pandemia. No podemos decir del todo que dicho tema esté ya superado, pero vamos por el buen camino y van superándose fases que vaticinan una vuelta a lo que era la vida previa al maldito virus en un plazo relativamente corto.

Aunque, si algo nubla la perspectiva respecto al futuro inminente de la pandemia, podemos referirnos a la tensión y enrarecido clima social en puntos del país originario del problema. El descontrol en la cifra de contagios y las situaciones límite que se dan en Shanghái, sabedores de la que se lio tras lo sucedido en Wuhan, mantienen el miedo en todo el mundo.

Pero España es diferente. Nosotros ya nos vemos fuertes para decirle adiós a esta catástrofe en poco tiempo. Interesadamente, para que nos olvidemos cuanto antes de lo malos que son, nuestros incomparables gobernantes piensan dar carpetazo a un drama que ha servido de ejemplo claro para dejar en evidencia a un Gobierno de tercera ante problemas de Champions.

La Semana Santa pasó, con los pasos y procesiones por las calles de toda España, salvo donde la lluvia condicionó la celebración o se disponía de fanáticos alcaldes que anteponían la paranoia política a la religiosidad del momento, en referencia al separatista que gobierna Palafolls. Y, a tenor de los resultados de nuestra encuesta, un 78% la celebró como merecía. De ese porcentaje, el 11% lo hizo como cofrades y el restante 67% como fieles que asistieron a celebraciones propias de estas fechas tan significadas para la cristiandad.

El restante 22%, lo que podría ser una mayoría aplastante si fuese una encuesta de Tezanos, usa los días en rojo del calendario, que señalizan la Semana Santa, como meras fechas -sin más- en las que disfrutar de vacaciones. Una postura que también nos vale, pero nosotros nos quedamos con el sentimiento y la devoción respaldada por la mayoría.