A finales de los cincuenta del pasado siglo se pasaba mucho frío por España y, por mi pueblo, Sabiote, allá por los cerros de Úbeda, aún más. Entonces, sin elecciones calefactoras y con el brasero de picón como argamasa y único aliado, a las familias no nos quedaba más remedio que permanecer unidas a su alrededor.

Era algo así para el cuerpo, como puede venir a ser ahora para el alma el juntarse alrededor de unas siglas en un acto electoral buscando el calorcillo de los propios, sabiendo como se sabe el que fuera, siempre puede hacer frío, mírese por donde se mire.

La insoportable presencia de “los otros”; el terrible sentimiento al que ha conseguido llevarnos el desenterramiento de la Memoria Histórica del Zapatero remendón de tan infausto recuerdo.

Pero, de vez en cuando la Puerta de la Villa se animaba con un vendedor ambulante que subido sobre su desvencijada camioneta y con lenguaraz palabra, asumiendo su personalísima campaña electoral, no paraba de disparar palabras y palabrería más tendente a narcotizar a los boquiabiertos presentes en aras de hacernos creer que venía a salvarnos, a tapar nuestra desnudez y frío.

Así es que de forma enfática y desenfadada no desperdiciaba un segundo en “vendernos la burra”, mediante aquello de…”Sras. Y Sres…ni por doscientas,ni cien ni por cincuenta…por veinticinco pesetas se llevan la manta y encima les regalo dos peines”, mientras mis paisanos, embobados a sus pies, recibíamos con tal unción su anestesiante desparpajo que, raro era el espectador (otrora votante), que no picara, vaciándole a aquél espabilado ciudadano su camioneta de los duros que decía ofrecer a tres pesetas. Un auténtico heraldo de lo que sería la futura política.

Recuerdos que salen desde la infancia y al menor descuido. Sí, porque si durante toda la legislatura nos han hecho vivir con la percepción de que pudieran considerarnos como a esos monitos orientales que ni deben oír, ver ni hablar, ahora, con sus promesas , ocurrencias y regalos de última hora de llamarnos descaradamente imbéciles, con su infeliz y simplona idea de que con cuatro caramelillos o espejuelos, como si fuéramos indios sioux, se nos puede llevar sin pelear y de nuevo hacía su reserva de cautivos y engañados, como se llevaban a los judíos desde sus guettos hacía los campos de exterminio, mientras les podían prometer fértiles tierras al final del viaje.

Y, lo hacen sin vergüenza alguna, porque deben de creer el que hemos olvidado el que durante cinco años nos han engañado a todos, poniéndonos los cuernos tras su infidelidad con filoetarras e independentistas y, no solamente eso, sino que ahora, como si tuviéramos la desmemoria de un avanzado deterioro cognitivo, vuelven a insultar nuestra sensibilidad y patriotismo, tardando horas, incluso,en admitir que socios y asesinos condenados en sus listas no son de recibo. Excede, con creces, lo que hasta cualquier estómago agradecido puede soportar. Afirmación a la que han llegado ya con las listas publicadas y hasta próximamente votables, aunque “prometan” que no piensan tomar posesión de sus cargos.

Alguien pudiera caer en la demoníaca trampa una vez más, como hizo “el felón Sánchez”, el de la imposición del trágala democrático gubernativo, como nuestros padres nos imponían las lentejas fachas?

Los de las trampas del gobierno más abyecto y malparido de la historia reciente, dado su distócico alumbramiento.

Qué horror con el nuevo parto de la izquierda nueva y que como el anterior, no se ha producido por la vía normal. Aquél otro, el del Zapatero de tan triste recuerdo, saliendo de entre el humo de unos trenes, cuál maléfico duendecillo, y este otro, desde el fraude y las mentiras más descaradas y abyectas.

Ellos, que como aquella epidemia de Filoxera en el siglo XIX han venido no solamente a arruinar vides y campo, sino la economía y la convivencia entre todos los españoles.

Pero en fin, después de cinco años podremos hablar el próximo 28/mayo y porque el tiempo todo lo puede y dentro de él, como escondida, siempre se puede encontrar su vengadora espada, esta noche he soñado que así como “el Chavismo, el Zarrismo y el Griñanismo, entre otras muchas corruptelas” fueron encarcelados o desterrados en mi querida Andalucía, así y ahora, en el resto de España, el Sanchismo y todos sus adictos solo quedaran para el recuerdo, como los chistes de Gila, aunque el último sea para el cajón de lo que nos ha engrandecido a los humanos y , lo otro lo del SSS…(EL SOCIOSANCHISMOSOEZ) esté ya en nuestra personalísima memoria como sinónimo de lo que nunca, por sus mentiras, alianzas contranatura perversas y ruina económica, ningún otro gobernante debería de imitar en el futuro.

Y, de sobra es sabido, gracias a nuestro sabio refranero, que quién a hierro mata a hierro pudiera acabar muriendo. No puedo dejar de acordarme de él, mientras tras recordar el nacimiento del Gobierno actual, puedo asegurarles, porque uno es añoso y disfruta del ojo clínico más que suficiente , que precisamente ellos, sus socios separatistas y demás ralea van a ser los responsables de su extinción, cuál dinosaurios …para años. Amén

Luis Manuel Aranda
Médico Otorrino
De la Sociedad española de médicos escritores