Cuando el pasado 28 de julio la oposición venezolana da una maravillosa sorpresa al mundo con una victoria aplastante en las elecciones de ese país, todos supimos también que ninguna facilidad iba a tener el presidente electo Edmundo González, ni la inspiradora de esta campaña y ejemplo admirable de heroísmo, María Corina Machado.

El actual mandatario que se erige en perpetuo dictador se auto proclama vencedor, con un sabido pucherazo, al tiempo que la oposición ha logrado superar amplísimamente una rotunda mayoría.

Llevamos ya once días sin que, quien es calificado de responsable de crímenes de lesa humanidad, Maduro, según el informe de la ONU, de explicación de las actas de las elecciones y proclame, en cambio, un pucherazo y el presidente del Gobierno español, así mismo, callado, sin denunciar a un tirano criminal, ni conminarle a dejar paso a los ganadores por abultada mayoría. No solamente ello, sino que no da explicación alguna sobre su amigo y colega de mítines, el ex presidente Zapatero, que callado como un muerto tampoco denuncia la situación dado que es cómplice absoluto de Maduro para ser voz amable de un sátrapa ante el mundo y por tanto encubridor desde el comunista Grupo de Puebla, al que pertenece, de un criminal del neocomunismo; y en este mismo momento hacer lobby para que el Grupo de Puebla no exija la entrega de las actas de las elecciones venezolanas y no digan que en Venezuela ha habido fraude absoluto.

Así estamos, el presidente del Gobierno aliado plenamente con el ex presidente Zapatero para encubrir a un delincuente de postín, así declarado por Naciones Unidas.

Mientras, ayer otro hecho, que en definitiva pertenece a la misma escala de inmoralidad más abyecta y a la misma escala de ataque directo a la legalidad y por tanto a todas las normas que dan crédito a la democracia. Un fugitIvo de la justicia española entra en España con un paripe de no detención para dar un mitin de cinco minutos antes de la elección del nuevo presidente de la Generalidad, tras un pacto que de nuevo ataca directamente la constitución cediendo ilegalmente la recaudación a Cataluña, y perdonando miles de millones también, y ese otro supuesto candidato, el fugado, monta el número para reclamar que debía ser él, pero sigue manteniendo al presidente del Gobierno – con el que pactó una ley de amnistía inconstitucional – que es quien ha ordenado no detenerlo, para darle gusto, y así seguir en la silla, juntitos los trileros, cada uno con su apetencia.

El tal Puigdemont tras un teatro de la operación de los Mossos que bloquea Cataluña y encierra injustamente a los catalanes en plenas vacaciones se vuelve a “ escapar“ y “desaparece“, y todo ello pactado por un presidente del Gobierno traidor a la Constitución, al Estado, al ordenamiento jurídico, a su propio cargo institucional de presidente de Gobierno e incluso traidor a él mismo como persona mínimamente respetable y honesta.

El otro escenario paralelo logra su investidura tras el pacto con ERC y así el presidente del Gobierno tiene contentos a los dos partidos golpistas, el del fugado, y el del hasta hoy presidente de la Generalidad Aragonés.

Mientras esto se produce, los españoles de vacaciones y el presidente del Gobierno cercado de corrupción por su mujer, por su hermano, por sus ministros y por su partido también está ausente. Los gravísimos insultos al Rey ayer en sede del Estado como es el parlamento catalán, los gravísimos desprecios al conjunto de España, los gravísimos ataques a la Constitución y al Estado, las gravísimas soflamas de nuevo golpe al Estado, como si no existieran.

El único responsable de esta criminal y abyecta situación es el presidente del Gobierno al que acuso de facilitar todo ello y de poner todos los medios del Estado para no encerrar a los delincuentes- lejos queda su promesa de hacerlo – y ser colaborador, inductor y cómplice de una permanente rebelión de delincuentes, incluidos los que llevan sus listas electorales ensangrentadas. Un presidente de Gobierno responsable maximo de un humillante espectáculo mundial al escapársele un fugitivo al que le debe ser presidente del Gobierno, de un humillante y delictivo pacto para deshacer la igualdad financiera de los españoles, y mientras la prensa mundial también le retrata por corrupción.

Acuso al presidente del Gobierno de aprovechar el verano y el cansancio de los españoles para dar el mismo el mayor golpe a España jamás ocurrido, y le acuso de ser cómplice del mayor fraude electoral, que encabeza un presidente venezolano, acusado de delitos de lesa humanidad. Le acuso de impedir desde España, la libertad y la ley a quienes han ganado las elecciones en Venezuela.

Le acuso de ser en estas horas el mayor traidor al pueblo español y el mayor traidor al pueblo venezolano. Le acuso de ser el único caso en la historia de una democracia en el que alguien representa la mayor inmoralidad y la sublimación de la indecencia más abyecta . El ejemplo de una perversion sin precedentes y de la mayor deshonra de España. Son ya 280 días en los que nos manifestamos en Madrid, en Burgos y otros puntos de España en contra de una ley de amnistía que ataca el corazón de la democracia española y el corazón de la democracia de Europa. 280 días, nueve meses seguidos, en defensa de la independencia judicial y de la democracia. Desde el 29 de Julio, así mismo, nos manifestamos en defensa del pueblo venezolano, de su presidente electo Edmundo González y de María Corina Machado. El pueblo español, españoles de a pie, de cualquier idea, en defensa de los valores supremos de la democracia en Venezuela y en España. En Ferraz, en Madrid, se está produciendo la defensa del “ We The people”, el grito unánime sin precedentes en Europa, para clamar unidos por las columnas vertebrales de la democracia, por el valor supremo de la libertad de Venezuela y de España.

Amalio de Marichalar

Artículo publicado en “SevillaInfo”